Todos vivimos en un drama eterno. Todos creemos que tenemos razón, sí, lo afirmamos hasta el final de la historia. Todos somos ignorantes hasta un cierto punto. Ya me cansé del drama en el cual conviven muchas personas, y me hacen meter a mi. También me cansé de yo convertir todo en un drama y darle demasiada importancia a las palabras de algunas personas. Es que, ya cualquier cosa me cansa. Lo único que hago todo el día es pensar. Y pensar, y llegue a un punto en el cual no sé distinguir entre lo bueno y lo malo, lo que está bien o lo que está mal. Creo que todos pensamos que tenemos muchas cosas seguras en la vida. Uno cree que una persona es como es y al otro día te das cuenta que no, que se pasó la vida ocultando cosas pero esas cosas se descubren, sí, de eso me di cuenta. Vivo pendiente, agarrándome de cualquier frase que traspasa mi mente y me hace reflexionar. Es tan cansante tener que estar todo el día así. Pensando como van a reaccionar cada una de las personas que conozco. Si, en cualquier momento me echo a correr y no voy a dejar que nadie me pare. Verdaderamente, me está sofocando tener que lidiar con el pensamiento de los demás. Y si hago tal cosa, tal se va a enojar conmigo. Y si hago tal otra, soy una hija de puta, y si hago tal otra también está mal. Ya no sé que hacer, tampoco sé dejar contentos a todos. Nadie es tan bueno y nadie es tan malo. Solo hay que aprender a convivir con los defectos de uno y de los demás, y nunca olvidarse de los propios defectos, porque al final, son los que mas deberían preocuparnos. Nadie la tiene tan clara como se piensa, y ya todos me tienen las pelotas por el piso con sus críticas. ¿Que tengo todo el día? Si hago una cosa recibo críticas de un lado. Si hago totalmente lo contrario también recibo críticas. ¿Saben que es lo peor? La gente cree que las escucho. Al final, solo escucho las críticas que tienen como fin mi bien interior.
Lo único que veo coherente es mandar todo a la mierda, pero se sabe que yo no soy muy coherente que digamos. Bueno, hago todo lo que puedo y nada de lo hago es con maldad :)¡aunque algunas personas piensen lo contrario! Todo lo que hacemos es una locura, pero el mundo está loco.
Cada uno comete las locuras que tiene ganas de cometer; y los demás, bueno, los demás están solo de adorno para decirte qué cosas hiciste mal.
Intenté que algo valiera la pena. Escuche pero dejé que se fuera. Recordé todo lo libre que era.
No hay comentarios:
Publicar un comentario