Me pasé toda la vida preparándome para una vida, y empezaba a creer que había salido mal en algún momento, pero tal vez, tú eres la razón. Para todo. Tal vez, tú eras el plan al que me tenía que aferrar.
La vida pasa cuando te ocupas en hacer otros planes. Pero tienes que vivir, dejar de planear los movimientos, deja que pasen. Te podría sorprender.
Para el otoño, ya estaba lista de nuevo. Un poco golpeada, más humilde, y espero que más sabia. Creo que escribimos nuestra historia, y siempre que creemos saber el final, no es así. Tal vez, existe la suerte. En algún lado, entre el mundo de los planes, el mundo del azar y la paz que viene con saber, que no puedes saberlo todo. La vida es extraña de esa manera, y cuando sueltas el volante podrías terminar justo donde debes.
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